Cómo manejan las mujeres a los amantes terribles

Cómo manejan las mujeres a los amantes terribles

Estas mujeres revelan cómo manejan a las parejas que no están haciendo el mejor trabajo para satisfacer sus necesidades en la cama

A veces, el mayor problema que tienen los hombres y las mujeres cuando se trata de todo lo relacionado con el sexo es la capacidad (o incapacidad) de comunicarse, al menos de una manera que no ofenda ni insulte a la otra parte.

, porque soy mujer, puedo hacer que las mujeres sexualmente activas se abran y revelen algunas de las formas en que manejan la situación cuando los hombres con los que se acuestan no cumplen exactamente con sus deberes, por así decirlo.

esto es sobre ti

Antes de profundizar en todas las cosas horribles y desagradables que algunos hombres les han hecho a las mujeres en medio de actos sexuales y cómo reaccionaron dichas mujeres, tenga en cuenta que este artículo tiene la intención de ayudarlos a darse cuenta de que si no son perfectos en la cama (y vamos a acéptalo, ¿cuántos de nosotros somos realmente?), todavía hay esperanza para que rectifiques el error de tus caminos.

Y sí, soy muy consciente de que hay mujeres por ahí cuyos talentos sexuales no van más allá de los de un cadáver, pero esto no se trata de los problemas del sexo débil, se trata de los problemas que tienen con los hombres.

Puntuación de 4.3

Gina, de 27 años, una agente de bienes raíces de Florida que admite haberse acostado con más de 75 hombres en los últimos 9 años (con orgullo, debo agregar), admite que ha llegado a un punto en el que es franca con los hombres sobre sus habilidades sexuales. "Sé que soy genial en la cama porque he hecho llorar a los hombres y me suplican que los cabalgue mientras jugueteo con sus penes con mi boca. "Peso sobre mí y básicamente comencé a actuar como un perro en celo. Me desanimé tanto que le dije que se bajara de mí y fuera a leer un manual de Sex For Dummies antes de que regresara a mi habitación. Después de todos los hombres, yo" ve En este punto, he estado debatiendo si debo o no mantener tarjetas de puntuación debajo de mi cama para que cuando terminemos, pueda calificarlas.

Me gustaría agradecer a la Academia

"Solo he estado con dos hombres en toda mi vida", dice María, de 31 años, "mi novio de la secundaria y mi esposo. No estoy segura si alguna vez llegué al orgasmo con alguno de ellos, pero créanme, puedo poner en una actuación que haría que Meg Ryan corriera por su dinero. A veces me meto tanto en la simulación, que incluso creo que he llegado al orgasmo. El problema es que mi esposo es terrible en la cama y básicamente termina en tres minutos: juegos previos y todo. No tengo el corazón para decirle que no puedo soportar el hecho de que muerde mis pezones y frota mi clítoris como si estuviera tratando de iniciar un incendio, así que supongo que tengo la misma culpa como el es."

El chisme y su veneno

Desafortunadamente, había al menos 15 mujeres a las que entrevisté que dejaron en claro que nunca le dirían una palabra a su pareja sobre lo insatisfechas que estaban en la cama, pero que desafortunadamente le darían una charla a sus novias sobre el tema. "Todos los domingos por la tarde, me encuentro con las chicas y les cuento todas las estupideces que hace mi esposo en la cama", dice Cheryl, una higienista dental de 46 años. "Nos burlamos de él y tenemos palabras clave que usamos para referirnos a ciertas cosas. Por ejemplo, 'dribbling' se refiere al hecho de que babea toda mi vagina cuando la lame".

Annie, de 25 años, continuó; "Solía ​​contarles a mis amigos lo increíble que era mi novio en la cama, desde lo bueno que era besando hasta la forma en que vertía lubricante en mis genitales y me llevaba al orgasmo... pero aprendí la lección. y desde entonces he mantenido la boca cerrada porque luego atrapé a uno de mis 'amigos' tratando de [comerlo] en la mesa de mi cocina".

El entrenador, el creador de listas y el atacante del punto G

me convierto en entrenador personal

"Siempre le haré saber a un hombre lo que hace bien en la cama para que pueda seguir haciéndolo", admite Jenny, una representante de ventas de 30 años. "Cuando hace algo mal, lo detengo con las manos o le digo que me incomoda. Ningún hombre se ha ofendido por nada de lo que le he dicho. Por otra parte, solo me acuesto con hombres con los que he hablado de sexo". con regularidad. El sexo es muy importante para mí, pero no se equivoquen, no me acuesto con cualquiera. Soy muy selectiva y estoy orgullosa de decir que nunca he hecho una mala elección cuando se trata de amantes. . Por otra parte, los entreno a mi gusto..."

Listado de pros y contras

"Uno de mis amigos me dijo una vez que una mujer nunca debería hablar sobre el mal sexo con su pareja justo antes, durante o justo después del sexo", revela la estudiante de UCLA Alyssa, de 19 años. "Así que opté por tomar nota de todo lo que no me gustaba. sobre el comportamiento sexual de mi novio, como el hecho de que me maldecía (lo llamaba hablar sucio), me tiraba del pelo, me azotaba, me mordía el clítoris y se las leía un día mientras cenábamos. vez que vi llorar a un chico... no hace falta decir que no pudo mantener una erección después de eso. Lo peor es que pensé que nos haría un favor a los dos".

Probar las aguas

"Me gusta rudo, pero eso no es algo que puedas decirle a los chicos de buenas a primeras o pensarán que eres una zorra o, peor aún, que te gustaría una paliza sexual", dice Giovanna, de 31 años. primero y dejo que haga su mejor espectáculo para mí en el saco. Luego, cuando creo que es seguro, rompo las ataduras y lo ato a la cama, boca abajo. Le digo exactamente lo que me gusta y le pregunto si eso es Está bien. Si comienza a actuar como un niño asustado, lo desato y lo despido. Si se vuelve increíblemente entusiasta, juego con su punto G y hago que eyacule sin control. Después de eso, no hay nada que un hombre no haga por mí. "

te comunicas?

Es obvio que estarás o habrás estado, en un momento u otro, en una relación en la que no comunicas sobre sexo adecuadamente. Pero hay que estar atento, hacer preguntas y sobre todo prestar atención a la reacción de una mujer cuando le haces ciertas cosas como hacerle un cunnilingus o penetrarla.

Dile lo que te gusta, lo que te imaginas haciéndote y anímala a hacer lo mismo. Por supuesto, a veces puede ser necesario un poco de persuasión, pero si eres extremadamente abierto sobre el sexo y le haces saber que todas sus fantasías son aceptables, entonces con el tiempo, no habrá nada que ninguno de los dos dude en discutir.

Obtenga gráficos sobre sus fantasías e intente representar algunas de ellas. Si finalmente desea mantener una vida sexual y una relación saludables, debe comunicar lo que le gusta y lo que no le gusta del comportamiento del otro en el dormitorio, así como en otras áreas de su relación. De lo contrario, es posible que se encuentren peleando por las pequeñas cosas, o peor aún, uno de ustedes puede terminar en los brazos del otro.

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